En defensa de dietas bajas en HC

2

Comentarios

  • Fer, todo lo que no esté avalado por nuestros endocrinos no tendría que estar aquí.
    No puede ser un foro que confunda a los que lo consulten.
    Si es así, me voy a ir ,y lo sentiría.

    Hija de 35 años , diabética desde los 5. Glico: normalmente de 6 , pero 6,7 la última ( 6,2 marcaba el Free)
    Fiasp: 4- 4- 3 Toujeo: 20
  • ¿La dieta BHCAG (LCHF) Difícil o Fácil?

    Un montón de buenas grasas añade sabor a su comida y hace que todos los alimentos tengan mejor sabor. Y es que las grasas son las que llenan.
    Adaptable, LCHF funciona todo. Fácil de dejarlo por ejemplo, papas , papas fritas, arroz y pedir una buena salsa rica en grasa en su lugar, como salsa bearnesa.
    El deseo de cosas dulces desaparece totalmente. No hay necesidad de sentir hambre puedes comer hasta sentirte lleno.
    Funciona para toda la familia, si un miembro de la familia quiere una patata la puede tomar sin problema.
    Se convierte en un estilo de vida que es fácil de mantener.
    Te da mucha más energía.
    La comida LCHF es fácil de hacer y sabe muy bien.
    No hay necesidad de contar calorías.
    Usted duerme bien.
    Se mantiene saludable y no se enferman con facilidad.
    Mejora la calidad del cabello y las uñas.
    En general se siente muy bien.
    Difícil :
    Reducir el consumo o dejar totalmente las frutas.
    Algunas personas piensan que estás loco o que eres un pesado.
    Las personas siempre tienen diferentes opiniones acerca de las cosas, e incluso acerca de esta forma de comer.
    Traducido de un artículo en Internet con Google Traductor
  • Las mujeres con diabetes tipo 2 en mayor riesgo de enfermedad cardíaca
        
    por BARBARA HEWITT en 04 de noviembre 2013

     
    Las mujeres jóvenes y de mediana edad con diabetes tipo 2 tienen un riesgo mucho mayor de enfermedad de la arteria coronaria de lo que se creía, ha encontrado un nuevo.

    En general, las mujeres menores de 60 años están en un riesgo mucho menor de enfermedad coronaria que los hombres de la misma edad. Sin embargo, entre las mujeres de esa edad que tienen diabetes, el riesgo de enfermedad cardíaca aumenta hasta cuatro veces , lo que es aproximadamente igual al riesgo de la misma forma de la enfermedad cardíaca de los hombres .


    Un estudio muestra que las mujeres de cualquier edad que tienen diabetes tienen un mayor riesgo de enfermedad coronaria que los hombres.
    El nuevo estudio realizado por un equipo de la Universidad John Hopkins en Baltimore, Estados Unidos, se cree que es el primero que se centra específicamente en las diferencias de género en la enfermedad arterial coronaria entre las personas jóvenes y de mediana edad con diabetes.

    " Nuestros hallazgos sugieren que es necesario trabajar más para prevenir la enfermedad cardíaca en mujeres menores de 60 años que tiene diabetes, " dijo Rita Rastogi Kalyani , endocrinólogo de la Facultad de Medicina y autor principal del estudio de la universidad.

    " Este estudio nos dice que las mujeres de cualquier edad que tienen diabetes están en alto riesgo de enfermedad arterial coronaria ", explicó, agregando que mientras que los hombres por lo general tienen una mayor incidencia de enfermedades del corazón que las mujeres, el estudio encontró que la diabetes tenía poco o ningún efecto sobre el riesgo de enfermedades del corazón de los hombres .

    Para la investigación, ella y sus colegas analizaron datos de más de 10.000 participantes en tres estudios considerados por muchos: el Programa de Investigación GeneSTAR , el Estudio Multiétnico de Aterosclerosis y la Salud Encuesta Nacional de Nutrición (NHANES) III . Ninguno de los participantes tenía un historial de enfermedades del corazón. Los tres estudios arrojaron diferencias de género similares en los índices de diabetes y el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón .

    "Nuestro estudio se suma a la creciente evidencia de que existen diferencias de género en el riesgo de enfermedad coronaria causada por la diabetes, " Kalyani señaló .

    Ella también dijo que en las mujeres y los hombres, estos resultados no se relacionaron con las diferencias en la obesidad y otros factores de riesgo cardiovascular tradicionales, como la presión arterial alta , el colesterol y el tabaquismo.

    Kalyani y sus colegas ofrecen varias posibles explicaciones para el aumento del riesgo . Puede haber factores genéticos y hormonales distintos relacionados con el desarrollo de la enfermedad cardíaca por el género. Las diferencias en la adherencia a los hábitos de vida saludables del corazón , el cumplimiento y el tratamiento de los tratamientos cardiovasculares entre los géneros también son posibles, pero es necesario investigar más , dice Kalyani . Además, la relación de la duración de la diabetes y control de la glucosa con el riesgo de enfermedades del corazón sigue siendo poco clara .

    El equipo, que también incluyó a Mario Lazo, Pamela Ouyang , Karinne Chevalier , Frederick Brancati , Diane Becker, y Dhananjay Vaidya de la Escuela Johns Hopkins School of Medicine , y Evrim Turkbey , Médico de Radiología y Ciencias de las Imágenes en los Institutos Nacionales de Salud Clínica Center, ha publicado sus hallazgos en la última edición de la prestigiosa revista Diabetes Care.
    Copiado de Diabetesforum.com traducido por Google Translate for Business:Translator ToolkitWebsite Translator
  • www.carbohidratos.net
    Metabolismo e hidratos de carbono
    Los hidratos de carbono, ya sean hidratos de carbono simples o hidratos de carbono complejos, empezarán a romperse casi de inmediato cuando el alimento entra en la boca. La propia saliva comenzará a disolver los hidratos de carbono simples. La amilasa es una enzima que se encuentra en la saliva que es necesaria para que los hidratos de carbono complejos empiecen a descomponerse. La amilasa empieza a transformar los hidratos de carbono con almidón en glucosa. Esta actividad fisiológica comienza a activar el metabolismo de inmediato.
    A medida que los alimentos se abren paso en el intestino delgado se encuentran con una mayor cantidad de la enzima amilasa. Ahora, la amilasa actuará para continuar con la descomposición de los hidratos de carbono complejos. Los hidratos de carbono simples (es decir, los azúcares simples) entrarán en el torrente sanguíneo. Los azúcares simples son absorbidos rápidamente por el cuerpo. Una vez en el torrente sanguíneo el cuerpo los utiliza para obtener energía inmediata o almacenar los hidratos de carbono simples en forma de glucógeno hasta que se necesiten. Si el cuerpo tiene un excedente de energía, los hidratos de carbono simples se convierten en grasa y se almacena para su uso posterior.
    Esta es la forma fundamental en que los hidratos de carbono y el metabolismo están relacionados. Cuando se alimenta al cuerpo con hidratos de carbono el proceso digestivo aumenta el metabolismo simplemente activando el proceso digestivo.
    El cuerpo almacena hidratos de carbono en forma de glucógeno cuando el cuerpo detecta azúcar extra en la sangre de nuestro sistema. Esto es provocado por los niveles de insulina. Así que cuando hay un nivel alto de azúcar en la sangre se libera la insulina para que le diga al cuerpo que almacene el azúcar adicional en forma de glucógeno. Si el cuerpo no produce suficiente insulina (como en la diabetes), entonces no será capaz de reducir el azúcar en la sangre. Aquí es donde entra en juego la medicación.
    La glucosa es el macronutriente preferido del cuerpo para su uso como fuente de combustible. Sin glucosa en los músculos y en los órganos no funcionará correctamente. Se sugiere que al menos la mitad de las calorías diarias vengan de los hidratos de carbono. La fuente de hidratos de carbono debe provenir de alimentos como granos enteros, frutas y verduras. Se debe evitar el consumo de alimentos tales como pasteles, galletas, dulces y refrescos. Sí, estos alimentos contienen hidratos de carbono pero son azúcares simples y no ofrecen mucho valor nutritivo.
    Hay una compleja relación entre los hidratos de carbono y el metabolismo. No trates de averiguarlo por ti mismo. Puedes aprender de un experto en el campo de las dietas en la nutrición y en el ejercicio que pueda guiarte en la dirección correcta.
  • Diabetesforum.com diabetesnews
    Las personas con diabetes tienen el doble de probabilidades de tener una discapacidad que personas que no tienen diabetes, según un nuevo estudio realizado en Australia.
    Un informe titulado "La diabetes y la discapacidad: las deficiencias, limitaciones en la actividad, restricciones en la participación y comorbilidades“ en el Instituto Australiano de Salud y Bienestar (AIHW) muestra que los más graves discapacidades son más comunes en personas con diabetes.
    células
    El informe encontró que las tasas de discapacidad entre las personas con diabetes fueron del 39 % en comparación con el 17% de los no diabéticos.
    Se define la discapacidad como cualquier impedimento, limitación de actividad o restricción de la participación que puede ser desde restricciones menores en las actividades cotidianas de profunda pérdida sensorial como la vista.
    Discapacidades más graves se describen como limitaciones en las actividades básicas severa o profunda, lo que significa que una persona a veces o siempre se necesita la ayuda de una o más actividades esenciales de la vida diaria, como las actividades relacionadas con la movilidad, la comunicación y el cuidado personal.
    Las tasas de discapacidad entre las personas con diabetes fueron del 39 % en comparación con el 17% de los que no tienen diabetes, después de ajustar por las diferencias de edad. Y la tasa de limitación severa o profunda en las personas con diabetes fue del 14% en comparación con el 5 % de los que no tienen diabetes.
    "Si bien existe una clara asociación entre la diabetes y la discapacidad, a partir de estos datos no podemos sacar conclusiones sobre las causas de esta asociación,"dijo el portavoz de AIHW Susana Senes.
    La discapacidad más frecuente fue la restricción de la actividad física o el trabajo, y Senes dijo que la combinación de diabetes y discapacidad tuvo un gran impacto en la participación en el empleo.
    Entre las personas en edad laboral con la diabetes y la discapacidad, el 40% dijo que eran permanentemente incapacitado para trabajar, en comparación con el 20 % de las personas con discapacidad que no tenían diabetes.
    En comparación con las personas sin diabetes, los diabéticos también reportaron tasas más altas de presión arterial alta, colesterol alto, enfermedades del corazón, derrame cerebral, depresión, pérdida de la visión y los trastornos relacionados con el riñón.
    El estudio encontró que el 10 % de las personas con diabetes reportaron haber sufrido un derrame cerebral y más de 15 % reportaron tener enfermedades del corazón.
    En 2009, se estima que 827.020 personas en Australia tenían diabetes. De éstos, 357.829 informaron que la diabetes fue la condición de salud haciendo que la mayoría de los problemas. De todas las personas con diabetes, 441.640 informaron que tenían una discapacidad, añadió Senes.
    El AIHW es una agencia nacional creada por el Gobierno de Australia para proporcionar información y estadísticas confiables.
  • Hola,

    sólo por compartir mi experiencia. Sin animo de entrar en debates y con la única arma de mi propia experiencia y lecturas.

    Erguiye tiene razón.

    Me diagnosticaron diabetes tipo 1 hace dos años y me recomendaron una dieta "tradicional" alta en CH (incluso mas de los que habitualmente tomaba).

    Hace 1 y medio mi pareja muy interesada en temas de salud empezó a hacer la dieta paleo (baja en CH). Los resultados en su salud fueron espectaculares (perdida de peso, normalización colesterol, menos grasa corporal, fuerza, energía...)

    Tras mucho pensarlo y con mucho miedo y dudas me lance al ruedo y solo puedo decir que es la mejor decisión que he tomado. Se me han normalizado y estabilizado los niveles por debajo de 100. He reducido la insulina y las mediciones (sólo una o dos aleatorias a lo largo de día). Y por último pero lo más importante tengo fuerza y energía durante todo el día. Voy al Gym entreno fuerte, me siento bien.

    No tengo nada que ganar y no aportaré argumentos para defender mi postura (el que los quiera los tiene en internet) sólo quería contaros mi caso por si a alguien le ayuda.

    Esta persona me ayudo a mi:

    http://www.marksdailyapple.com/type-1-diabetes-no-match-for-primal-lifestyle/

    Un abrazo.
  • Acabo de recibir mi analítica correspondiente al 19 Nov 2013: A1c 5.7%; Glucosa 90; Triglicéridos 71; HDL 57; Cociente Colesterol 3.2; Todos los resultados de Hígado y Riñones normales. (Quien quiera datos, que me los pida.
    Esta dieta BHCAG (LCHF) me sigue yendo muy bien y ya van 5 meses seguidos. Me sigo sintiendo perfectamente. Me sigue faltando ejercicio. Saludos.
  • Gracias, Dionisos por este enlace:
    http://www.marksdailyapple.com/the-primal-blueprint-21-day-challenge/#ixzz2lFrUdeTe

    El Reto de 21 días en 30 segundos
    Este es el desafío. Hazlo sólo durante 21 días y los resultados hablarán por sí mismos.
    1. Comer comida de verdad.
    2. Evite el azúcar, los cereales, las grasas no saludables, frijoles/legumbres.
    3. Adaptar su consumo de hidratos de carbono a sus metas de peso y niveles de actividad.
    4. Moverse con frecuencia a un ritmo más lento: Realice entre 2-5 horas a la semana de ejercicio aeróbico moderado.
    5. Levantar cosas pesadas: Realizar 1-3 breves e intensos períodos de sesiones de los movimientos funcionales del cuerpo completo.
    6. Dar rienda suelta. Correr, ¡todo afuera! una vez por semana.
    7. Obtener 8 horas de sueño cada noche.
    8. Recibe 15 minutos de exposición directa del sol cada día.
    9. ¡Juegue! Encuentre tiempo para dejarse ir, desconectar, relajarse y divertirse cada día.
  • He aquí mi última analítica casi completa
  • Hola Erguiye, en mi familia (dos padres y 4 hermanos solo yo con diabetes), todos nos alimentamos así.

    Cada uno lo adapta en función de sus objetivos. Desde dietas mas puramente cetogenicas (60-70% grasas y sin frutas) para perder grasa corporal a otras mas bajas en grasas y con mas verdura y fruta (con mucha moderación y preferiblemente frutos rojos) como es mi caso. Mi novia y muchos amigos también comen así y ni uno solo ha tenido ningún problema. Antes bien al contrario en cuanto a colesterol, glucosa en sangre fuerza y energía). Llevamos ya más de un año así y ya es para siempre

    Creo que es de vital importancia el ejercicio. En este punto yo he cambiado tambien mi enfoque . He pasado del cardio crónico al ejercicio de alta intensidad (sprints, tabata), musculacion y andar. No corro un metro pero ando una barbaridad.

    Un link muy bueno en cuanto a alimentación y deporte es fitnessrevolucionario.com. Échale un vistazo.

    Tengo 37 años.

    Un saludo
  • traducción automática sin corregir

    Evaluar LCHF como un tratamiento para la diabetes

    Carta al Editor : actitud defensiva dogmática investigadores Nutrición ' impide el progreso y cuesta a los contribuyentes miles de millones de dólares.

    LCHF

    OPINIÓN El consejo dietético que muchos diabéticos reciben de los profesionales sanitarios es obsoleta e inútil. Defensiva Dogmática en el mundo de la ciencia académica impide el progreso y esto cuesta a los contribuyentes miles de millones cada año .

    Los resultados de un estudio científico que debería haber creado gran noticia de primera plana en todo Suecia se publicaron el pasado verano. El estudio, mirar hacia el futuro , es la evaluación longitudinal más grande que jamás se ha hecho , siguiendo las recomendaciones de estilo de vida para los diabéticos a través de las últimas décadas. Miles de personas fueron monitoreados de cerca para seguir una baja en calorías , dieta baja en grasas y hacer ejercicio. Perdieron peso y durante todos los años del estudio , pesaron menos que el grupo control.

    PERO . Después de nueve años, los investigadores terminaron el estudio prematuramente. La pérdida de peso no tuvo un impacto significativo sobre la morbilidad y la mortalidad por enfermedad cardiovascular. Los resultados mostraron claramente que las consultas de estilo de vida que los diabéticos habían sido dados como parte de su régimen de cuidado de la salud habían sido una pérdida de tiempo y dinero.

    En mi libro " Una sangre dulce" Examiné la base científica para las dietas bajas en grasa. La creencia de que una dieta baja en grasa sería protectora del corazón , se basa en la suposición de que los científicos realizados en la década de 1950 : que el nivel de colesterol total es la medida más importante de la salud . La decisión no fue basado en la ciencia , pero desde entonces el 1970 del dominó por completo todo tipo de guías alimentarias . Incluso los diabéticos tipo 1 (diabetes juvenil ) se han informado en primer lugar, para evitar la grasa , a pesar del hecho de que el colesterol alto no es ni siquiera parte de sus problemas médicos. Según los dietistas , aunque los diabéticos tipo 1 deben llenar sus platos con los hidratos de carbono , a pesar de que la ciencia demuestra claramente que altos niveles de azúcar en la sangre causa la enfermedad cardiovascular.

    Los diabéticos , independientemente del tipo, funcionan a 3.2 veces más riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares en comparación con una persona sana. Un estudio europeo importante de 2004 mostró que casi siete de cada diez personas afectadas por la enfermedad cardiovascular tenían diabetes o estaban pre - diabético. La investigación de biología molecular también ha demostrado que los niveles de azúcar en la sangre causan inflamación en las arterias , lo que conduce a la aterosclerosis . Que la intervención Mirar Adelante ha fracasado , por lo tanto se puede explicar más fácilmente por el hecho de que una dieta baja en grasa, que es , por definición, una dieta rica en hidratos de carbono de azúcar en la sangre de fondos , hace que el azúcar en sangre de los diabéticos fluctúa demasiado.

    El miedo a la grasa que nació en la década de 1970 parece haber hecho muchos médicos se olviden por completo que la diabetes una vez fue llamada " la enfermedad del azúcar" . Si los diabéticos de la década de 1920 hubiesen recibido el asesoramiento dietético de hoy pronto habrían muerto . El hecho es que las directrices dietéticas actuales para los diabéticos requieren que los médicos prescriban medicamentos que inhiben el efecto que los carbohidratos tienen en el azúcar en la sangre .

    Por desgracia , el debate dieta climatizada de hoy nos muestra que muchos investigadores y médicos continuarán despreciando calorías , grasa y colesterol más que cualquier otra cosa . Cientos de diabéticos en una dieta LCHF testificar que una dieta estricta baja en hidratos de carbono tiene un efecto dramático en sus niveles de azúcar en la sangre y la salud. Muchos pierden mucho peso y son capaces de interrumpir la medicación . Pero los principales investigadores nutricionales desestiman sus historias como anecdótico. Su actitud defensiva dogmática es un obstáculo para el progreso.

    La diabetes tipo 2 es una de las principales enfermedades de nuestro tiempo. Aparte de todo el sufrimiento , los costos en Suecia cantidad solos a 0,5-1% del producto nacional bruto de Suecia. Una increíble cantidad de dinero. Con el fin de resolver el debate de dieta que el gobierno debe invertir en estudios de alta calidad . Necesitamos financiación de los estudios científicos de alta calidad que, sin ideas preconcebidas evaluarán qué pautas de estilo de vida mejor a proteger el corazón de los diabéticos . La asignación de $ 15 millones sería una gota en el océano en comparación con lo que los costos de salud . Por 365.000 diabéticos de Suecia , por el contrario , esto podría significar la diferencia entre una vida de salud y una muerte prematura.

    Ann Fernholm

    Aftonbladet : ( . Artículo original en sueco, por el periodista científico Dr. Ann Fernholm , Suecia ) Evaluar LCHF como un tratamiento para la diabetes
  • De la revista digital Diabetesincontrol.com. Traducción con Google y corregido por mí.

    TENEMOS que mejorar sus opciones de alimentos y la actividad física para mejorar su nivel de glucosa y colesterol.
    La mayor parte de la glucosa proviene de consumo de hidratos de carbono y por lo que tendrá que restringir algo la cantidad que consume. Trate de comer no más de 100g de hidratos carbono diariamente para mejorar su pérdida de peso y hasta 150 carbohidratos al día si el peso no es una preocupación.
    Su necesidad de insulina está directamente relacionada con los hidratos de carbono que consume y ya que su capacidad de producir y utilizar la insulina se ve disminuida tiene sentido tratar de disminuir la necesidad exceso de insulina .
    Esto significa comer más verduras , alimentos ricos en fibra , carnes magras y proteínas y menos de los almidones en los hidratos de carbono. Midiendo sus niveles de glucosa antes y 2 horas después de comer se puede evaluar el efecto de los alimentos y hacer cambios en consecuencia. Un buen objetivo sería no más que un aumento 30mg/dl después de una comida .
    Toda la actividad física que realize requiere glucosa por lo que cuanto más activo sea mejor serán sus niveles de glucosa. Si puede realizar de 15 a 20 minutos de actividad ininterrumpida habrá recorrido un largo camino para reducir los niveles de glucosa y la resistencia a la insulina que su cuerpo ha acumulado.
    El uso de estas técnicas se traducirá en lecturas mucho más estables de glucosa, una A1c mejor y puede ayudar a la pérdida de peso sostenible lento y constante de 1-2 libras a la semana.
    Pruebe estos 3 pasos sencillos para mejorar su nivel de glucosa y de peso cada día :
    1 . Beba 500ml de agua helada al levantarse
    2 . Coma por lo menos 30 gramos de proteína dentro de 1 hora de despertarse
    3 . Haga 20 minutos de actividad física dentro de 1 hora de despertarse
  • ¿Qué da mejores resultados?
    ¿por qué el régimen de pocos hidratos de carbono y poca insulina es el mejor modo de tratar la diabetes?

    RON RAAB B.Ec.
    Presidente de la Corporación Insulina para la Vida
    (Copyright – Ron Raab)

    RESUMEN

    Este artículo presenta en forma breve mi experiencia personal antes y después de seguir un método para tratar mi diabetesTipo 1, dependiente de insulina; dicho método consiste en combinar una ingesta con pocos hidratos de carbono, poca insulina, proteína en forma moderada y grasa en forma apropiada.

    En el presente se señala la lógica inherente y las muchas ventajas que tiene este régimen para diabetes Tipo 1 y Tipo 2, así como las contradicciones inherentes en un método con alto contenido de hidratos de carbono y alto contenido de insulina, incluyendo las recomendaciones nutricionales y de hidratos de carbono que dan, entre otros, la American Diabetes Association, Diabetes Australia y otras Asociaciones sobre Diabetes, incluyendo la falta de evidencia que sustente sus recomendaciones.

    Se hace referencia a algunas evidencias que han surgido hace poco y que se refieren, por ejemplo, al peligro de que los niveles de glucosa en sangre aumenten después de las comidas y explica de qué manera este régimen puede ayudar a evitarlo. Señala que el infusor de insulina no es necesario para lograr un nivel óptimo de azúcar en la sangre.

    Se menciona el Diabetes Centre de Nueva York que se especializa en este método y que me educó en su empleo. Este artículo se basa en lo que aprendí en dicho centro y vengo aplicando desde Junio de 1998. También incluye los comentarios de mi médico australiano sobre la forma en que ha mejorado mi control de azúcar en la sangre y cómo ha disminuido la hipoglicemia, así como algunos comentarios profesionales sobre aspectos relativos a la nutrición. Se refiere además a su aplicación en países en vías de desarrollo en los cuales el elevado precio de la insulina ocasiona su menor empleo.

    Dejo constancia de que este artículo no representa la posición de ninguna de las organizaciones médicas con las cuales trabajo. El artículo refleja mis experiencias y observaciones personales resultantes de haber puesto en práctica lo que aprendí de médicos responsables y de otras personas que promueven este método.

    Lógica y experiencia con el método de consumir pocos hidratos de carbono /poca insulina /proteína en cantidades moderadas /grasas en cantidad apropiada para controlar la diabetes.
    En 1957, a la edad de 6 años me diagnosticaron Diabetes Tipo 1 y empecé con una inyección diaria de insulina que aumentó a dos por día en 1959. En 1984 aumentó a 3 diarias y desde 1994 a cuatro por día.

    En 1980 empecé a hacerme yo mismo el análisis de glucosa en sangre y antes de ello hacía los análisis de orina. Ahora hago el análisis 4 veces al día (usando un glucómetro calibrado para plasma ) y también hago ejercicios en forma moderada 2 ó 3 veces por semana.

    He tenido algo de retinopatía de fondo y una cierta neuropatía, incluyendo un retraso en vaciar el estómago. Esta situación iba empeorando antes que iniciara este nuevo régimen y me preocupaba seriamente. Hice todo lo que pude por alcanzar niveles de glucosa en sangre realmente buenos y seguí las recomendaciones actuales de la Asociación de Diabetes y de los médicos, educadores en diabetes y dietistas que recomendaban consumo alto de hidratos de carbono y bajo en azúcares . A pesar de ello no podía lograr niveles de glucosa casi normales en forma continua y el resultado fue que cada vez tenía hipoglucemias más severas... las recomendaciones no me servían.

    En 1998, a través de numerosos contactos me enteré de que había otro método: un plan alimenticio consistente en la ingesta de pocos hidratos de carbono, alimentos de índice glucémico bajo junto con una dosis de insulina mucho menor y la posibilidad de comer proteínas. También visité un centro de diabetes en Nueva York que se especializa en esto. Su Director (el Dr. Richard Bernstein ) ha tenido Diabetes Tipo 1 por más de 50 años. Él ha seguido este régimen alimenticio desde hace muchos años después de realizar muchos experimentos y reportó que sus controles de diabetes mejoraron significativamente. Me interesé también en este método pues había observado a lo largo de muchos años que mi azúcar en sangre mejoraba cuando menor era mi ingesta de hidratos de carbono. Esto me alentó aún más a intentar una dieta muy diferente, si bien seguía siendo algo escéptico y buscando resultados. Me intrigaron los informes de HbA1c (Hemoglobina glicosilada) normales en el libro del Dr. Bernstein y en los informes noticiosos; en la página web: http://www.diabetes-normalsugars.com y en narraciones personales. Recomiendo con firmeza a todos los interesados en alcanzar niveles excelentes de glucosa en sangre que lean este libro (Dr. Bernstein's Diabetes Solution - A Complete Guide to Achieving Normal Blood Glucose –Solución para la Diabetes del Dr. Bernstein: Guía Completa para Obtener Glucosa en sangre normal) Richard K. Bernstein, M.D. Publisher: Little Brown and Co.) La mayor parte del libro está disponible sin costo alguno en el Internet, en la página indicada.

    Lo que queremos lograr es niveles normales de glucosa en sangre y para mí ésa fue la razón principal para examinar este método de pocos hidratos de carbono. Todos sabemos que la recomendación actual no produce niveles normales de glucosa en sangre en forma continua, momento a momento.

    Yo no seguí este método antes porque el régimen aceptado y recomendado generalmente era una dieta con alto contenido de hidratos de carbono y no había nada que sustentara o alentara intentar un cambio tan radical. Como he estudiado estadística y trabajo profesionalmente en el tema de la diabetes, me sentí también capaz de revisar la literatura publicada al respecto.

    La dieta baja en hidratos de carbono ha sido debatida muchísimo en los Estados Unidos y en otros países y lo sigue siendo; hay una creciente discusión sobre ella en revistas y conferencias sobre la diabetes.

    He experimentado mucho esta dieta y desde julio de 1998 he reducido la cantidad diaria total de hidratos de carbono de 200 gramos en esa fecha hasta 30 gramos diarios en el 2000, todos ellos son del tipo de hidratos de carbono de absorción lenta.

    Estos son algunos de los resultados:

    Mi dosis de insulina ha disminuido en 55% hasta 16 unidades diarias. Mi HbA1c ha mejorado en 33% hasta llegar a 5.6% y sigue mejorando. Hay mucha menor variación en los niveles diarios de glucosa en sangre. La hipoglucemia es mucho menos severa; en realidad las bajas son muy suaves, sólo necesito 3 tabletas de 5 gramos de glucosa para recuperar el nivel. Ya no hay más oscilaciones dramáticas ni necesito “tiempo extra” para recuperarme, lo que sí ocurre regularmente con el régimen rico en hidratos de carbono y alto en insulina. ¡Qué alivio!

    Mi peso ha bajado de 84 Kg a 72 Kg y el índice de masa corporal se mantiene en el rango normal; la retinopatía se ha estabilizado (mi oftalmólogo tomó especial interés en esta notable mejora); la presión sanguínea se mantiene normal y los lípidos están en el rango normal /aceptable y lo han estado la mayor parte del período de 4 años transcurridos desde que empecé este régimen - habiéndome esforzado en no consumir en exceso el tipo “malo” de grasas.

    Es importante señalar que el hambre ha disminuido (la insulina es un estimulante del apetito y con este régimen ha sido necesario usar mucho menos insulina). El régimen causa mucho más motivación, menos frustración y ha mejorado enormemente mi calidad subjetiva de vida y mi visión de la vida. Sin embargo todavía siento un poco de hambre por la noche y sigo experimentando con la dieta y el tipo y rango de las comidas, sobre todo en la noche. Confío en que éstas también disminuirán en forma importante. Continúo haciendo ejercicios en forma leve y regular. Me entusiasma la idea de continuar disminuyendo mi HbA1c aún más.

    No considero que esta dieta sea "radical" ni una "moda". No se debe confundir con las dietas extremas que se publican periódicamente, ¡sobre todo en Estados Unidos! No es una dieta con alto contenido de proteínas ni con alto contenido de grasas saturadas.

    ¿Cuál es la explicación?

    En muchos niveles es razonable disminuir la ingesta diaria de hidratos de carbono. ¿Por qué habría que comer tanto de un tipo de alimento que causa inestabilidad de glucosa en la sangre y que necesita (mucha) más insulina para (tratar de) corregir ese problema que a su vez crea más problemas? No hay evidencias que favorezcan una ingesta mayor de hidratos de carbono en vez de una menor en lo que respecta al control de glucosa en sangre ¡¡y sin embargo esto es lo que se generalmente promueve y recomienda!! Asimismo, las enfermedades renales parecen ser una consecuencia del alto contenido de glucosa en sangre y no de una mayor ingesta de proteínas, según profesionales como el Dr Bernstein y sus expertos colegas. Los principios generales también se aplican a la Diabetes Tipo 2 según se indica con detalle en el libro y en la página web.

    Cuanto mayor es la ingesta de hidratos de carbono, tanto mayor es el potencial para que sea impredecible determinar el momento y la magnitud del aumento resultante de glucosa en sangre. ¡Es como agregarle más gasolina a un incendio que no se puede controlar! Todos sabemos que es mucho más fácil controlar un fuego pequeño, que no es tan impredecible, que mantener bajo control un gran incendio al cual se le está echando una gran cantidad de combustible …… y lo mismo ocurre con el régimen de pocos hidratos de carbono y poca insulina .

    También sabemos que la absorción de insulina (vale decir la magnitud y el tiempo que toma la insulina en reducir la glucosa en sangre) es variable, tanto entre los distintos lugares como en los distintos momentos en que se inyecta. Esta variabilidad también aumenta conforme aumenta la cantidad de insulina inyectada. De ello se desprende por lo tanto que un carbohidrato alto (inclusive uno de lenta absorción) y un régimen concomitante de alta insulina debe ocasionar perfiles de glucosa en sangre más erráticos e impredecibles, en comparación con pocos hidratos de carbono y un régimen de poca insulina apropiadamente compatible. Ese es el punto central del asunto. ¡Los reto a demostrarme que no es así! ¡Hasta ahora nadie lo ha logrado! He descubierto que la gente no logra comprender la importancia y las implicancias de estas realidades, simples e inevitables. ¡Ignórelas a su propio riesgo!

    Cuanto menor es la mezcla de carbohidrato /insulina; menor es la variabilidad y mayor la posibilidad de predecir los niveles de glucosa en la sangre. La curva de glucosa se vuelve básicamente plana. Todo encaja cuando se sigue este método ¡y se siente uno maravillosamente!

    Aunque parezca sorprendente, esto está implícito en la recomendación “Medical Nutrition Therapy”[1] de la American Diabetes Association (ADA), la recomendación nutricional de Diabetes Australia y de muchas otras organizaciones. Y sin embargo, paradójicamente siguen recomendando un régimen rico en hidratos de carbono. Por ejemplo, la ADA señala que los alimentos con almidón (carbohidrato) elevarán la concentración de glucosa en la sangre y el aumento dependerá de la velocidad y totalidad de la digestión del almidón en una comida, lo que puede depender de muchos factores. Esto señala claramente que cuanto más alimentos con almidón se coman en una comida, mayor será la variabilidad potencial de glucosa en sangre. En vez de recomendar lógicamente una menor ingesta de hidratos de carbono recomiendan lo contrario, una gran ingesta – hasta 60% de calorías en hidratos de carbono, ¡¡lo que puede significar hasta 300 gramos de hidratos de carbono por día en algunas personas!! Diabetes Australia brinda recomendaciones similares.

    Cabe señalar que la prueba de tolerancia a la glucosa, que a veces se emplea para diagnosticar la diabetes, usa 100 gramos de hidratos de carbono para presionar el mecanismo corporal que regula la glucosa en sangre ¡para ver si se eleva por encima del nivel normal! Por consiguiente, si uno sigue este consejo de la ADA ¡puede muy bien forzar a su cuerpo a digerir o metabolizar el equivalente a tres cargas de pruebas de tolerancia a la glucosa cada día! Ciertamente se trata de un carbohidrato diferente, pero el volumen es el mismo. ¡No tiene sentido someter a semejante carga de hidratos de carbono a un cuerpo que ya tiene un problema grave para metabolizar hidratos de carbono!

    Aparentemente la razón histórica por la que este método ha sido promovido es que en los EU a comienzos de los años 50 se veía que la gente con diabetes sufría altas tasas de enfermedades cardíacas. Esto se atribuía al mayor consumo de grasas, resultante de lo que entonces era una recomendación de consumir menos hidratos de carbono diariamente. Se pensaba lo siguiente:

    – “si disminuimos el consumo de grasa para disminuir el riesgo de enfermedades cardiacas, ¿qué van a comer los pacientes?” Por ello decidieron comenzar a aumentar la cantidad de hidratos de carbono a fin de proporcionar la ingesta de calorías que tenían como meta. Esto se hizo sin examinar las implicancias que podía tener una mayor ingesta de hidratos de carbono en la variación de la glucosa en sangre, la contribución de los propios hidratos de carbono a las enfermedades cardiacas y los posibles efectos negativos resultantes de los mayores niveles de insulina necesaria para (tratar de) controlar los niveles de azúcar en la sangre. Esta recomendación se ha mantenido hasta la fecha y a través del tiempo el porcentaje de calorías de los hidratos de carbono ha ido aumentando.
    Sin embargo, sabemos que simplemente no es cierto que todas las grasas coadyuven a las enfermedades cardiacas – las saturadas pueden hacerlo pero las grasas insaturadas pueden más bien proteger contra dichas enfermedades. Por lo tanto se deduce que es fácil y sensato construir una dieta que sea baja en hidratos de carbono (y que por lo tanto requiera mucho menos insulina), baja en grasas saturadas y más rica en grasas insaturadas – con lo cual se pueden obtener las calorías deseadas. Un ejemplo sencillo de las calorías que se pueden obtener de las grasas insaturadas saludables es agregando aceite de oliva a una ensalada. Dos cucharadas de aceite de oliva rinde 360 calorías – una cantidad muy significativa para las necesidades diarias y que se puede aumentar fácilmente en otras formas con otras grasas insaturadas.

    Por lo tanto, no es cierta la afirmación de que una ingesta alta en hidratos de carbono es indispensable para satisfacer las necesidades calóricas de los diabéticos debido a las enfermedades cardiacas.

    La demora y variabilidad en el vaciado del estómago (gastroparesis), debido a una función disminuida del nervio vago (neuropatía diabética), se suma a los niveles variables e impredecibles de glucosa en la sangre. Cuanto mayor es la ingesta de hidratos de carbono tanto mayor es la magnitud de la impredecible variabilidad adicional en la glucosa también debido a esta causa.

    La demora en vaciar el estómago puede ser muy desagradable y los síntomas varían de un malestar ligero hasta uno mayor y doloroso. El efecto del control del azúcar en la sangre también depende directamente del volumen de hidratos de carbono consumido. Los grandes volúmenes pueden permanecer en el estómago por períodos de tiempo variables y luego en forma impredecible y posiblemente en forma muy súbita, pueden ser ‘procesados’ o ‘vaciados’ ocasionando la entrada impredecible de azúcar en la corriente sanguínea.

    Además cuanto mayor es la cantidad de hidratos de carbono consumidos, tanto mayor es la cantidad de insulina inyectada, pero los hidratos de carbono se quedan en el estómago sin digerir por períodos de tiempo impredecibles. No obstante la insulina está trabajando lógicamente y causando cantidades variables de azúcar en la sangre con la posibilidad de que haya grandes bajas. Luego, después de un lapso impredecible de tiempo, los hidratos de carbono son digeridos e ingresan a la corriente sanguínea elevando inmediatamente el azúcar en la sangre.

    El gran contenido de hidratos de carbono en la comida contribuye a aumentar el alto contenido de glucosa en sangre y las hipoglicemias en esta situación.

    La literatura médica indica que el vaciado retardado del estómago en la diabetes ocurre en 50% de los pacientes con diabetes Tipo 1 y Tipo 2.

    ¡No es lógico promover un régimen con alto contenido de hidratos de carbono a esas personas!

    Y sin embargo se hace todo el tiempo como parte de la educación nutricional convencional que se imparte a dichos pacientes.

    ¡Desafío a cualquier lector para que justifique la dieta rica en hidratos de carbono en tales circunstancias! ¡Sigo esperando!

    También existe evidencia continua de que hay una relación entre altas dosis de insulina y el desarrollo de enfermedades vasculares, incluyendo dolencias cardiacas, independientemente de cualquier otro factor. Esto significa que una persona que sigue un régimen rico en hidratos de carbono está aumentando potencialmente con ello el riesgo de una enfermedad al corazón, en tanto que una persona que ingiere pocos hidratos de carbono, y por consiguiente está en un régimen de poca insulina está evitando el posible factor de riesgo.

    También se especula que el trágico fenómeno conocido como “muerte en la cama” también podría ser causado por las grandes cantidades de insulina que muchos toman para compensar la ingesta tan alta de hidratos de carbono ocasionando con ello una baja que acaba con su vida, o a través de algún otro mecanismo cuando el desequilibrio es particularmente malo. Esto sería plausible, ¿no les parece?

    También hay cada vez más evidencias del daño que pueden causar breves aumentos de azúcar en la sangre, después de las comidas, en el desarrollo de complicaciones en la diabetes. Por consiguiente, aunque el nivel de HbA1c pudiera ser, por ejemplo 7.5%, que muchos consideran razonablemente bueno, el régimen rico en hidratos de carbono y rico en insulina inevitablemente produces mayores oscilaciones en el azúcar en la sangre que su alternativa, y contribuye aún más a complicaciones de la diabetes por este motivo adicional. En realidad quisiera señalar que un HbA1c de 7.5% corresponde a un promedio de 200mg/dl (11.1 mmol/L) de azúcar en la sangre, que es más del doble de un índice normal de azúcar en la sangre de 85 mg/dl (4.7 mmol/L).

    Recientemente han surgido fuertes evidencias de que “ciertos tipos de hidratos de carbono pueden afectar en forma adversa los niveles de colesterol en la sangre”- como resultado de 5 grandes estudios en Australia, Europa y los Estados Unidos.

    En Diabetes Voice (International Diabetes Federation), Marzo del 2002, se señala en un artículo del Dr Swift, Secretario General de ISPAD (International Society for Paediatric and Adolescent Diabetes[2]) que:

    "el manejo nutricional comúnmente se describe como una de las piedras angulares en la atención de la diabetes ... lamentablemente es la piedra angular quizás menos comprendida, menos investigada y a la cual hay mínima adherencia ..."
    La edición de diciembre de 2001 de Diabetes Forecast (American Diabetes Association), indica en un artículo titulado "Investigación Revolucionaria - 2 ° Parte" en conclusión, que:

    "los sujetos con Diabetes Tipo 2 experimentan mejoras clínicamente importantes en los niveles de triglicéridos … con una dieta con alto contenido de ácidos grasos mono insaturados y que … es necesario volver a analizar las dietas con alto contenido de hidratos de carbono y pocas grasas en la Diabetes Tipo 2".
    Felizmente se invierten enormes recursos y esfuerzos en el desarrollo de nuevas insulinas y la prensa así como la literatura médica tiene mucha información y debates sobre los diversos perfiles sobre diabetes. Sin embargo, ¡no hay tanta precisión sobre la otra cara de la moneda, aquélla sobre la cual actúa la insulina, sobre todo los hidratos de carbono! Por lo tanto una variable es sumamente regulada y a la otra se le permite variar entre parámetros sumamente amplios. El resultado debe ser una mayor variación en el azúcar en la sangre. Éste es un enfoque sesgado, que carece de lógica. Con el componente hidratos de carbono /dieta se viene cometiendo el mismo tipo de filosofía que felizmente, después de muchos años fue corregido por los resultados del Estudio sobre El Control de la Diabetes y sus Complicaciones (DCCT). La mayoría de gente comprendió en forma lógica e intuitiva que deberíamos tratar de tener un índice normal de azúcar en la sangre, y sin embargo muchos consideraban que sin “evidencias”, era aceptable permitir un control muy mediocre de azúcar en la sangre. Si se hubiera exigido que esa recomendación estuviera justificada con mayor precisión se habrían evitado muchos sufrimientos y muertes prematuras. En general, esta misma filosofía se está aplicando a las recomendaciones sobre los hidratos de carbono con resultados peores que los que se obtendrían con otras alternativas.

    También lo podemos comparar con el proyecto de aterrizaje en Marte que tenía la NASA. Muchos de los más sofisticados y calificados científicos del mundo estuvieron dedicados al aterrizaje de la nave espacial en Marte en el año 2000. Y sin embargo cometieron un error básico. No se dieron cuenta de que los norteamericanos estaban usando unidades imperiales (pulgadas) mientras que los Europeos, algunos de los cuales también estaban trabajando en el proyecto, estaban usando el sistema métrico (mm). ¡Esto provocó que la nave no llegara a Marte! Lo mismo ocurre con un régimen rico en hidratos de carbono – tenemos mucha gente altamente calificada y dedicada desarrollando regímenes sumamente sofisticados y sin embargo no se está prestando atención a un asunto fundamental: que los niveles de glucosa en sangre varían y van a variar en forma cada vez más impredecible conforme aumente la cantidad de hidratos de carbono.

    Países en Vías de Desarrollo Económico

    La lógica de este método tiene implicancias enormes para el tratamiento de la diabetes en los países en vías de desarrollo. El costo de la insulina en esos países es muy alto – con frecuencia cuesta $US30 y más por vial– y el suministro mensual necesario suele representar 50% o más del ingreso familiar promedio. El régimen rico en hidratos de carbono requiere mucho más insulina para tratar de mejorar los niveles de azúcar en la sangre. Al seguir un régimen con bajo contenido de hidratos de carbono, la dosis de insulina disminuirá en forma muy significativa tal como ha ocurrido con aquellos de nosotros que hemos adoptado este régimen. En mi caso, la dosis de insulina ha disminuido en 60%. Esto representaría un ahorro financiero muy importante para esas personas y esto es algo que nunca debemos subestimar. ¡En términos relativos esto significaría que una persona promedio en un país desarrollado ahorrara $US500 al mes! Evidentemente pueden haber otros elementos externos, pero este método también es muy lógico en esta situación. Por si fuera poco, mejoraría muchísimo el control de glucosa en sangre, no sólo por el régimen de pocos hidratos de carbono /poca insulina, ¡sino también porque muchas personas podrían costearse el volúmen de insulina que necesitan!

    Ejemplos de Harinas

    Éste es un ejemplo de una comida que satisface y que contiene 12 gramos de hidratos de carbono y 120 gramos netos de proteína:

    -sopa en base a concentrado de carne o pescado
    -ensalada de verduras frescas
    -bistec mediano o pescado o proteína vegetal
    -verduras cocidas (no papas ni similares)
    -café con un poquito de leche

    Hay todo un mundo de alimentos y comidas deliciosas con pocos hidratos de carbono y que satisfacen el apetito, fáciles de obtener o de preparar y hay otras páginas web en Internet así como muchos libros que traen recetas similares. El libro de Bernstein incluye algunos menús especialmente preparados con este enfoque. Se trata de un régimen sencillo y práctico que lo ayuda a tomar las riendas de su propia vida.

    Problemas con el Cálculo de los hidratos de carbono

    Compare la comida recomendada líneas arriba con la siguiente versión con alto contenido de hidratos de carbono, unos 100 gramos de hidratos de carbono y unos 120 gramos de proteína total :

    - sopa que contenga hidratos de carbono (por ej. Las sopas enlatadas que tienen muchos hidratos de carbono).
    - 2 rodajas de pan o similar
    - bistec o pescado mediano con pasta /papas /maíz
    - fruta /postre con hidratos de carbono
    - café con leche

    Si uno se equivoca al calcular los 100 gramos de hidratos de carbono (por ejemplo en un 20%), entonces uno tendrá 20 gramos de hidratos de carbono contados en exceso o en faltante. Esto se puede traducir en una variación de 80 mg/dl (4.4 mmol/L) en el nivel de glucosa en sangre para una persona de peso promedio. Incluso si el cálculo de la cantidad es correcto, los verdaderos componentes de la pasta, por ejemplo, podrían no estar bien calculados. Podría ocurrir que la pasta sea de un tipo especial que tenga huevo o de un tipo de harina diferente. Además de ello uno necesitará mucha más insulina para (tratar de) compensar esta gran carga de glucosa, con todo lo variable e impredecible que puede ser la absorción y la acción de la insulina. Sumemos a esto que algunas gastroparesias (que se ha reportado en la mayoría de diabéticos que tienen diabetes por más de 5-10 años) y tendremos todos los elementos para una gran variación de azúcar en la sangre, incluyendo la posibilidad de una baja severa en algún momento durante las horas siguientes a la comida. ¿Acaso no es exactamente esto lo que le está sucediendo a tantos pacientes? ¿Acaso este probable resultado no se explica por sí solo? Sus doctores y educadores les están diciendo que deben tratar de tener niveles normales de azúcar en la sangre (debido a los resultados del DCCT), y sin embargo ¡al mismo tiempo les están ordenando que tengan una dieta rica en hidratos de carbono lo que evidentemente vuelve imposible ese resultado! ¡Qué tal confusión! ¡Es la fórmula del fracaso!

    Para muchos de los que siguen ese régimen esto ocasiona también frustración, sentimiento de culpa, temor y depresión, como me sucedió cuando intentaba normalizar mis niveles siguiendo ese método. El método de consumir pocos hidratos de carbono y poca insulina resolvió por completo las causas subyacentes de estos problemas.

    Le he consultado sobre este asunto a la jefa del Laboratorio de Investigaciones Metabólicas y de Obesidad y Profesora de Medicina y Bioquímica del Centro Médico de Boston en los Estados Unidos. Ella opina que no hay motivo de preocupación en las proporciones y naturaleza de un régimen de pocos hidratos de carbono, proteína en cantidades moderadas, grasas en forma moderada, que propone este método. Es simple diseñar un régimen así para que sea completo desde el punto de vista nutricional.

    He aprendido de los expertos que las proteínas y las grasas son nutrientes esenciales, mientras que los hidratos de carbono no lo son. El cuerpo produce algunos hidratos de carbono a partir de las proteínas, sobre todo cuando hay poco o nada de hidratos de carbono en fuentes alimenticias externas. El cuerpo fabrica dichos hidratos de carbono lentamente, convirtiéndolo en la penúltima forma de hidratos de carbono en el índice glucémico, que es maravillosamente compatible con el perfil de la insulina regular. Casi 10% de la proteína ‘real’ o neta de un alimento se transforma de esta manera. Los hidratos de carbono no tienen nutrientes que no se puedan derivar de otras fuentes, por ejemplo, las vitaminas y minerales que hay en algunos alimentos con hidratos de carbono, como la fruta. También se dan en ensaladas y legumbres. En cualquier caso el régimen descrito en este artículo es un régimen de ‘pocos hidratos de carbono’ y no un régimen ‘sin hidratos de carbono’. Entonces, el régimen de pocos hidratos de carbono pasa todas estas pruebas y yo desafío a cualquier lector para que me den pruebas en sentido contrario. Cabe agregar que la recomendación actual de consumir pocas grasas, si se lleva a un extremo, es peligrosa porque se acerca al concepto de ‘sin grasas’ en tanto que la grasa es una fuente de ácidos grasos indispensables para la salud.

    El principal fabricante farmacéutico, Bayer, ahora incluye información sobre este método con los glucómetros que vende en Norte América y cita a diabéticos que usan este método como "pruebas vivientes del éxito de este método”. ¡Una compañía de esta envergadura no hace comentarios así a la ligera!

    He sido invitado a contar mi experiencia personal con este régimen en numerosas reuniones de profesionales de la salud y Asociaciones de Diabetes en Australia, Inglaterra y Japón. Hice una presentación en la Reunión Anual Científica de la Australian Diabetes Society y la Australian Diabetes Educators Association en Agosto del 2000 en el simposio “hidratos de carbono – Más o Menos”.

    Luego de esta presentación, mi médico el Dr Richard Arnott, hizo una serie de comentarios a los participantes, entre ellos que

    “la mejora en el HbA1c de Ron ha sido extraordinaria….su hipoglicemia, antes severa, ha mejorado … los lípidos se mantienen en un rango aceptable …. Es necesario hacer más estudios ... quizás ya es hora de cuestionar los dogmas aceptados…”
    El Profesor Paul Moffitt AM, especialista en diabetes y premiado por su contribución al tratamiento de la diabetes por el gobierno Australiano me escribió luego de mi presentación y dijo:

    “Yo creo firmemente en la dieta de pocos hidratos de carbono y lo creo desde hace muchos años.”
    Ya se habrán percatado de mi actitud frente al uso del infusor de insulina. En primer lugar, quienes usan el infusor se llegan a dar cuenta de que no es un sustituto para el conteo exacto de hidratos de carbono si se quiere mantener básicamente niveles normales de glucosa en sangre en forma continua. En realidad, quienes toman en serio los indicadores de azúcar en la sangre y usan el infusor mientras que a la vez ingieren ‘más’ hidratos de carbono terminan donde empezaron; es decir, tratando de nivelar hidratos de carbono e insulina con precisión, y esto no es posible cuando se consumen muchos hidratos de carbono. Lógicamente hay muchas personas que están felices con el infusor y eso está bien. Sin embargo puedo apostar que mientras ingieren muchos hidratos de carbono no logran el mismo nivel de control de glucosa en sangre que se logra con el régimen de pocos hidratos de carbono /poca insulina. En mi opinión y basado en mi experiencia (he sido un usuario del infusor de insulina por muchos años en mi lucha por detectar mejor el azúcar en la sangre), puedo afirmar que el infusor de insulina no brinda y no puede brindar el mismo nivel de control de azúcar en la sangre que sí brinda el régimen de pocos hidratos de carbono. Por lo tanto, el infusor es innecesario para el buen control de glucosa en sangre y no resuelve el problema básico: el impredecible resultado del consumo de mayores cantidades de hidratos de carbono.

    Se suele responder que este método es demasiado extremo o difícil para que lo adopte una persona “promedio”. Eso fue lo que pensé la primera vez que lo encontré, sin embargo aquí estoy después de haber experimentado el cambio y sentirme maravillosamente feliz con él y con los resultados obtenidos. Como ocurre con todo cambio importante en la vida, el mejor método consiste en hacerlo poco a poco y avanzar hasta que uno encuentre un nivel en el cual se sienta bien. Muchos no querrán reducir su ingesta diaria de hidratos de carbono a 30 gramos, que es el nivel que dará efectivamente un nivel normal de azúcar en la sangre si se hace correctamente.

    Otro ejemplo: la fruta ha sido parte importante de mi alimentación durante 40 años antes de hacer este cambio y ahora yo no como fruta y no la extraño (aunque la palta es parte de mi régimen y se podría considerar un tipo de fruta). Lo importante es que uno no agite con desesperación los brazos diciendo “¡Yo sé que esto me va dar mucho mejores niveles de azúcar en la sangre, pero es demasiado para mí!” Háganlo paso a paso y vayan avanzando …

    Todo cambio importante en la vida (como empezar en un nuevo trabajo, casarse o divorciarse, tener hijos, etc) exige ajustes sicológicos y de otros tipos y lo mismo sucede con este régimen. Esto ha sido mucho más fácil de lo que había pensado. Una vez que uno lo comprende y se reorienta, este régimen se integra a nuestra vida diaria y se convierte en lo nuevo “normal”.

    Yo estoy tratando de desempeñar un papel responsable en la discusión y el debate sobre estos temas. Para mí, y para muchos otros que ahora tienen niveles casi normales de azúcar en la sangre 24 horas al día, la única manera de lograrlos es con un régimen de pocos hidratos de carbono.

    En este artículo he tratado de mostrar la veracidad de este régimen y su inmensa superioridad cuando se trata de controlar los niveles de azúcar en la sangre y por otras razones importantes, en comparación con el régimen rico en hidratos de carbono. Siempre habrá gente que, aunque admita esta verdad optará por no seguir este régimen o lo siga sólo parcialmente, al igual que los fumadores pueden decidir continuar fumando por cualquier razón que fuere. Así como señalamos los peligros del cigarrillo yo he tratado de demostrar los peligros que entraña para los diabéticos cualquier régimen basado en el consumo de muchos hidratos de carbono y mucha insulina porque necesariamente conduce a niveles más altos y más impredecibles de azúcar en la sangre.

    Hay profesionales de la salud que desalientan este método activamente. Con todo respeto los desafío a que revisen este artículo, punto por punto y me refuten o indiquen dónde consideran que el razonamiento es incorrecto y que me señalen las razones por las cuales rechazan algún punto. Hasta ahora, cada vez que he pedido esto sólo he recibido respuestas generales, tales como “una dieta con pocos hidratos de carbono no es saludable” lo cual evita los asuntos centrales que yo planteo. No he recibido ningún hecho o evidencia que se pueda considerar en términos razonables que refuten el importante punto que aquí he planteado.

    En nuestra opinión la recomendación médica y nutricional que se brinda actualmente en el sistema institucional para que los diabéticos ingieran dietas con alto contenido de hidratos de carbono y mucha insulina está ayudando a crear resultados muy negativos. Consideramos que hay millones de personas que estarían mucho mejor con un régimen de pocos hidratos de carbono. Opinamos que la recomendación de consumir muchos hidratos de carbono como parte del tratamiento para la diabetes están causando un sufrimiento y un costo enorme e innecesario.

    Las opiniones médicas están evolucionando. Podemos examinar la historia del descubrimiento de la Penicilina por Alexander Fleming, quien dijo esta frase famosa “la Penicilina estuvo archivada en un estante durante 10 años mientras se me acusaba de curandero”. Otro ejemplo, 300 años antes, es el caso de la viruela, cuando Sir Thomas Sydenham desarrolló un tratamiento que redujo la tasa de mortalidad de 50% a alrededor de 2%. ¡El Colegio Médico Inglés de entonces trató de expulsarlo! Esto se parece al régimen de pocos hidratos de carbono en el tratamiento de la diabetes. Lo triste es que muchas personas tendrán pagar el precio hasta que finalmente se comprenda y se implemente.

    Adoptar un régimen de bajos hidratos de carbono es ciertamente un gran cambio. Debe hacerse responsablemente y con apoyo de expertos, con educación que permita comprender el cambio, de otra manera podrían presentarse situaciones especiales, como en cualquier otro régimen. Las personas interesadas en este enfoque deben ser conscientes de esto, por ejemplo respecto al tema de las acetonas. Hoy en día existen excelentes recursos aunque uno debe ser afortunado para acceder a ellos.

    En relación con las acetonas, mi pérdida de peso fué acompañada por algunos cuerpos cetónicos en la orina y éstos se relacionaron con los bajos hidratos de carbono y el ejercicio. Este es un tema sobre el cual necesité información competente y apropiada. Esto (ketosis) es distinto a la ketoacidosis diabética por la falta de insulina, por ejemplo.

    Sobre el tema de las cetonas, existe más información en http://www.diabetes-book.com y recomiendo hacer una búsqueda sobre 'cetoacidosis' y 'acetonas' (cuerpos cetónicos en orina; cetonas urinarias)

    En resumen, menos hidratos de carbono requiere menos insulina y esto produce menor variación y mejor pronóstico en los niveles de glucosa en la sangre.

    La página web de Internet http://go.to/insulinaforlife se refiere a mi trabajo profesional. La Corporación Insulina para la Vida , Insulin For Life Incorporated, fue fundada en 1999 después de que yo había trabajado en el International Diabetes Institute de Melbourne, Australia durante 20 años.

    Ahora los pacientes tienen las herramientas para mantener niveles casi normales de azúcar en la sangre todo el tiempo, si tienen la suerte suficiente de conocerlas y deciden usarlas ...

    Estoy eternamente agradecido al Dr Bernstein y sus colegas que me pusieron al tanto de este método. Gracias a ellos mi vida ha cambiado.

    Ron Raab B.Ec.
    Presidente, Insulin For Life Incorporated

    http://go.to/insulinaforlife

    Mejorando el Acceso a la Insulina y a los Suministros para Diabéticos de los Países Pobres.

    [1] Terapia médica nutricional (N. de la T)

    [2] Sociedad Internacional de Diabetes en la Infancia y Adolescencia (N. de la T)
  • Casi el 40 % de los pacientes no son conscientes de su riesgo de diabetes
    ¿Deberían los médicos hablar con los pacientes con más frecuencia acerca de sus factores de riesgo para la diabetes ? ...

    Una reciente encuesta realizada por la Asociación Americana de la Diabetes involucrado 1.400 pacientes y 600 profesionales de la salud para determinar su percepción de su riesgo de desarrollar diabetes. Según los resultados , el 40% de los que estaban en mayor riesgo de desarrollar diabetes sintió que de ninguna manera había un mayor riesgo y más de la mitad de los pacientes no reportaron tener conversaciones regulares con su médico con respecto a los niveles de azúcar en la sangre y otros factores de riesgo diabético factores . Sólo el 25 % de los que tienen mayor riesgo de desarrollar diabetes eran conscientes de su susceptibilidad.

    Según la encuesta , la mayoría de los pacientes sabía que los factores de estilo de vida para cambiar con el fin de ayudar a evitar el desarrollo de la diabetes , es decir, la dieta y el ejercicio. El problema podrá determinar en que el 80 % de los pacientes que se encontraban en situación de riesgo para la diabetes y debe cambiar su estilo de vida sintió que estaban actualmente en buena o excelente salud.

    Estos hallazgos indican que los médicos pueden necesitar ser más abiertos con los pacientes en riesgo de diabetes velando por que sean conscientes de sus riesgos , y lo que se debe hacer para frenarlos .

    Práctica Perlas:
    El cuarenta por ciento de los pacientes encuestados que estaban en un mayor riesgo de desarrollar diabetes sentía que no estaban en riesgo.
    Menos de la mitad de los pacientes encuestados informó regularmente de hablar con su médico acerca de los riesgos de desarrollar diabetes.
    El ocho por ciento de los pacientes que se encontraban actualmente en mayor riesgo de desarrollar diabetes reportaron ser de buena o excelente salud.
    Asociación Americana de Diabetes, diciembre 2013
    Traducción automática de Google sin corregir.
  • Hoy (25/3/14) me entregan los resultados de mi analítica del día 19/3/14. Sean cuales sean los resultados los publicaré aquí para saber y sepan todos (detractores y seguidores) cómo me ha ido ni estricta (bueno, no tan estricta) dieta baja en HC y alta en grasas después de NUEVE meses de seguirla. Dieta que no está dirigida ni recomendada a los compañeros DM!.
  • El aumento cocte albumin/crea or.aislada posiblemente se deba a que empecé con Forxiga hace algo más de un mes. Así mismo el aumento de la glucosa en orina.
  • Enserio! @Erguiye, somos muchos los diabeticos aki! , tmb de tipo 1 ( k lleban casi toda su vida siendolo) nadie te priva k comas o hagas lo k te apetezca. Pero siento comunicarte k casi todo lo k nos rodea son hidratos de carbono esas verduras k dices k consumes en ocasiones son similares por porcentege a los hidratos de carbono. ( ej. 200g fresas= 1 racion hidratos y 250 de judias= 1 racion de hidratos). Con los lacteos passa algo similar...
    A parte de ser diabetica puedo asegurarte k una dieta exclusivamente de grasas y proteinas te saturara tu pobre higado. Inicialmente tendras unas analiticas buenas y una sensacion de sentirte mejor ya k perderas peso y aumentaras masa muscular.. Pero a la larga te passara factura. Tu corazon, tu cerebro consumen carbohidratos y sino kieres k tu cuerpo los genere solos y se sature por los residuos k genera ese desgaste ,consume una dieta equilibrada.
    Aqui nadie tiene ganas de atacar a nadie estamos aki para apoyarnos y aconsejarnos entre todos.
  • AnNa: ¿Qué es una ración de hidratos? Yo los hidratos los mido por su peso. 6 gramos al desayuno, 12 gramos al almuerzo y 12 gramos a la cena (p.ej. Hoy mi desayuno ha sido: 175cl de leche , 2 huevos fritos y 1 1/2 salchichas de pollo, en total 9 gramos de HC. Me he pasado un poco porque se me acabó la leche de soja que es lo que tomo normalmente a razón de 1 gramo de HC por 100cl).
    Ya ves, si te molestas en leer las analíticas que he incluido te darás cuenta de que todo o casi todo es inmejorable. La dieta BHAG (LCHF) es perfecta para DM2 y no aconsejable para DM1, bulímicos, niños, embarazadas, con trastornos alimentarios, diálisis y en general personas que no sepan entenderlas, seguirlas y a las que no les esté prohibido razonadamente.
    Por favor, no confundas verduras con frutas o legumbres. Las verduras apenas contienen hidratos de carbono, mientras que frutas, legumbres y harinas no bajan del 50% de su peso en HC. Las vitaminas abundan en las verduras.
    Hidratos de carbono+grasas=triglicéridos+colesterol. Grasas sin hidratos de carbono a la cloaca directamente.
    A mí me va bien, por eso insisto, quizá les iría bien a otros diabéticos si no los asustaran tanto.
    De todas maneras gracias por tus opiniones, creo que son bien intencionadas.
  • As with all diabetes clinical recommendations, these should be tempered to meet the individual needs and circumstances of the patient. The 12 points of evidence from the study backed up by clinical studies are:

    High blood sugar is the most salient feature of diabetes. Dietary carbohydrate restriction has the greatest effect on decreasing blood glucose levels.
    During the epidemics of obesity and type 2 diabetes, caloric increases have been due almost entirely to increased carbohydrates.
    Benefits of dietary carbohydrate restriction do not require weight loss.
    Although weight loss is not required for benefit, no dietary intervention is better than carbohydrate restriction for weight loss.
    Adherence to low-carbohydrate diets in people with type 2 diabetes is at least as good as adherence to any other dietary interventions and frequently is significantly better.
    Replacement of carbohydrates with proteins is generally beneficial.
    Dietary total and saturated fats do not correlate with risk of cardiovascular disease.
    Plasma-saturated fatty acids are controlled by dietary carbohydrates more than by dietary lipids.
    The best predictor of microvascular and, to a lesser extent, macrovascular complications in patients with type 2 diabetes is glycemic control (HbA1c).
    Dietary carbohydrate restriction is the most effective method of reducing serum triglycerides and increasing high-density lipoprotein.
    Patients with type 2 diabetes on carbohydrate-restricted diets reduce and frequently eliminate medication. People with type 1 usually require less insulin.
    Intensive glucose-lowering by dietary carbohydrate restriction has no side effects comparable to the effects of intensive pharmacologic treatment.
  • De la revista digital Diabetes in Control
    Low-carb Diet Recommended for Type 1 and 2 Diabetes Patients
    Low-carbohydrate diets should be the first line of attack for treatment of type 2 diabetes, and should be used in conjunction with insulin in those with type 1 diabetes....

    Advertisement
    Conducted by a consortium of 26 physicians and nutrition researchers, the study suggests the need for a reappraisal of dietary guidelines due to the inability of current recommendations to control the epidemic of diabetes. The authors point to the specific failure of the prevailing low-fat diets to improve obesity, cardiovascular risk or general health, and to the persistent reports of serious side effects of commonly prescribed diabetes medications. By comparison, the authors refer to the continued success of low-carbohydrate diets in the treatment of diabetes and metabolic syndrome without significant side effects.

    Barbara Gower, Ph.D., professor and vice chair for research in the UAB Department of Nutrition Sciences and one of the study authors, stated that, "Diabetes is a disease of carbohydrate intolerance." "Reducing carbohydrates is the obvious treatment. It was the standard approach before insulin was discovered and is, in fact, practiced with good results in many institutions. The resistance of government and private health agencies is very hard to understand."

    The authors say their review of the medical literature shows that low-carbohydrate diets reliably reduce high blood sugar and at the same time show general benefit for risk of cardiovascular disease.

    Richard David Feinman, Ph.D., professor of cell biology at SUNY Downstate Medical Center and lead author of the paper, added that, "We've tried to present clearly the most obvious and least controversial arguments for going with carbohydrate restriction." "Here we take a positive approach and look to the future, while acknowledging this paper calls for change. The low-fat paradigm, which held things back, is virtually dead as a major biological idea. Diabetes is too serious a disease for us to try to save face by holding onto ideas that fail."

    Gower added that, "For many people with type 2 diabetes, low-carbohydrate diets are a real cure," said Gower. "They no longer need drugs. They no longer have symptoms. Their blood glucose is normal, and they generally lose weight."

    The authors caution that people with diabetes who are already on drugs for type 2 diabetes or are on standard amounts of insulin should undertake conversion to a low-carbohydrate diet only with the help of a physician. Because the diet may have a similar sugar-lowering effect, it is critical that drug doses be tapered off in order to avoid dangerous low blood sugar.

    Practice Pearls - As with all diabetes clinical recommendations, these should be tempered to meet the individual needs and circumstances of the patient. The 12 points of evidence from the study backed up by clinical studies are:

    High blood sugar is the most salient feature of diabetes. Dietary carbohydrate restriction has the greatest effect on decreasing blood glucose levels.
    During the epidemics of obesity and type 2 diabetes, caloric increases have been due almost entirely to increased carbohydrates.
    Benefits of dietary carbohydrate restriction do not require weight loss.
    Although weight loss is not required for benefit, no dietary intervention is better than carbohydrate restriction for weight loss.
    Adherence to low-carbohydrate diets in people with type 2 diabetes is at least as good as adherence to any other dietary interventions and frequently is significantly better.
    Replacement of carbohydrates with proteins is generally beneficial.
    Dietary total and saturated fats do not correlate with risk of cardiovascular disease.
    Plasma-saturated fatty acids are controlled by dietary carbohydrates more than by dietary lipids.
    The best predictor of microvascular and, to a lesser extent, macrovascular complications in patients with type 2 diabetes is glycemic control (HbA1c).
    Dietary carbohydrate restriction is the most effective method of reducing serum triglycerides and increasing high-density lipoprotein.
    Patients with type 2 diabetes on carbohydrate-restricted diets reduce and frequently eliminate medication. People with type 1 usually require less insulin.
    Intensive glucose-lowering by dietary carbohydrate restriction has no side effects comparable to the effects of intensive pharmacologic treatment.
    Nutrition July 2014
  • Para tranquilidad de mis amigos y no tan amigos sigo vivito y coleando. Con unas cifras divinas de colesterol, y demás. La HbA1c me ha subido a 7 de una record de 5,9 y también los triglicéridos me han llegado a 150 por no haber cumplido a rajatabla la dieta de BHCAG pero estoy de nuevo en el buen camino y pronto espero recuperar las cifras perfectas. Cada vez leo más y más sobre los beneficios de las dietas bajas en hidratos de carbonos y altas en grasas. Con encuestas y datos clínicos. Salud para tod@s.
  • Yo estoy totalmente en contra de las dieta Dunkan o Atkins que se basan en el consumo de grasas y proteínas y la anulación completa o consumo mínimo de HC. Y cada día mas a favor de la dieta Mediterránea.

    Nuestro cuerpo funciona con energía que básicamente viene de los HC. Si le suprimes los HC por debajo de la cantidad recomendada a la larga se deterioran todas las funciones neuronales.
    Tengo un montón de amigas "no diabéticas" que ha hecho la Dunkan y la Atkins cancelando casi la ingesta de HC como tu, por debajo de 130 g/día (cantidad mínima recomendada por todos los endocrinos) y si, en efecto, se aprecia notablemente la pérdida de peso que es lo que hace que te sientas mas liviana, ágil, mejor humor, con ganas de hacer cosas..... pero ahora están con problemas de hígado, riñón, intestino, etc. Los efectos secundarios en medio-largo plazo no compensan.

    @Erguiye tienes la misma edad que mis padres y casi los mismos problemas de salud; mis padres no son diabéticos; tienen achaques típicos de la edad por oxidación y desgaste, no podemos vivir eternamente.
    Creo que con la dieta que sigues en medio largo plazo vas a tener alguna complicación severa. Pero como es natural, cada cual es dueño de su vida y puede hacer con ella lo que considere mejor para sentirse bien y ser feliz.
    Suerte, contrólate y cuídate para no llevarte un susto irreversible.
    Lada enero 2015.
    Uso Toujeo y Novorapid.
  • Gracias por esta info, la verdad es que este foro me encanta. me alegra haberme registrado para participar de vez en cuando :)
  • Erguiye dijo:

    Lo mejor que me ha ido para normalizar mi azúcar en sangre es comer poco HC (Hidrato de Carbono) y mucha proteína. y grasas. Tomo 6 grs. HC al desayuno, 12 grs. al almuerzo y 12 grs. a la cena. Nada de dietas equilibradas. Ni poco de esto ni de aquello. De fruta nada en absoluto, ni olerla; ni harinas, ni legumbres, ni azúcar. Ya sé que esto crea controversia pero cada vez aumenta el número de los defensores de esta dieta (LCHF, baja en carbohidratos alta en grasas, por sus siglas en inglés, si quiere consultarlo en Internet). Gracias a esta dieta he bajado en tres meses mi glico de 11% a 5,9%, desapareciendo las malas cifras de colesterol y he bajado peso de 96.5 a 83.5. Soy tipo 2 desde hace 30 años. Mi meta es mantener CONSTANTEMENTE 85 mg/dl para alcanzar una glico de 5%. Nos han estado envenenando con azúcar desde hace décadas.

    Estoy totalmente de acuerdo contigo Erguiye esta dieta funciona como tú dices mal que les pese a los educadores de diabetes, yo me encuentro como un toro desde que la inicié, me he quitado todas las pastillas incluso la insulina llevo 10 meses y no me hacen falta drogas que te enferman mas que te curan, no te preocupes quien no quiera experimentar que siga como está midiendo calorías, jugando con la insulina y enfermando cada vez más cada uno es libre de escoger lo que quiera.
    Lleva una dieta baja en carbohidratos
    Si nuestro interés es bajar de peso, deberíamos empezar por evitar los azúcares y los almidones (como el pan). Este es un concepto antiguo, es más ha habido un número infinito de dietas para perder peso basadas en comer menos carbohidratos. Lo que es nuevo es que ahora hay muchísimos estudios científicos modernos que han probado que restringir carbohidratos en la dieta es la manera más eficaz de bajar de peso.

    https://www.dietdoctor.com/new-major-study-a-low-carb-diet-yet-again-best-for-both-weight-and-health-markers
    El artículo viene en ingles dar al traductor de Google para leerlo, en esta página te cuentan todo lo habido y por haber de la dieta LCHF, la unica que en 10 años con diabetes me ha funcionado, he perdido 25 kilos en 3 meses y de encontrarme mal nada de nada, que bueno haber encontrado esta dieta, me ha rejuvenecido.
  • mimbek dijo:

    Sinceramente, a mi esa dieta me parece un auténtico disparate. El cuerpo necesita comer de todo, y tú lo estás privando de legumbres, pasta, arroz, harina...fundamentales para una dieta equilibrada.

    Apenas comes hidratos, menos de los necesarios al día... que tengo entendido que son 40 gr.

    Una de las cosas que me explicó la educadora en diabetes cuando debuté fue las dietas que quitan los hidratos de carbono. Si tú dejas de comer hidratos de carbono, el cuerpo de alguna manera tiene que buscarse el combustible...¿qué hace? quemar grasa mediante cetosis. Me puso el ejemplo de la gente que hace huelga de hambre, sin comer unos 8 o 9 días el cuerpo entra en ese proceso, y puede morir en cuestión de horas. ¿Pierdes peso? Sí, pero a costa de qué??

    He llegado a leer en foros a chicas que estaban haciendo dietas donde se les quitaban los hidratos...angustiadas porque les habian dicho en la herboristería que no habían entrado en cetosis y que no habían perdido peso........

    Bueno, esta es mi humilde opinión.

    Hay muchos conceptos erróneos sobre la cetosis. El más común es confundirlo con cetoacidosis, una condición médica rara y peligrosa que ocurre principalmente en personas con diabetes tipo 1 si no toman insulina.Incluso algunos profesionales de la salud tienden a mezclar estas dos situaciones de alguna manera, tal vez debido a los nombres similares y la falta de conocimiento sobre las diferencias.

    La cetosis y la cetoacidosis no son lo mismo.

    La cetosis es un estado 100% natural, bajo control total del cuerpo. Puede ser causado por una dieta baja en carbohidratos o por un breve período de ayuno.

    La cetoacidosis es un mal funcionamiento grave del cuerpo, con producción excesiva y no regulada de cetonas. Esto conduce a síntomas como náuseas, vómitos y dolor de estómago seguidos de confusión y finalmente coma.
    Requiere tratamiento médico urgente, ya que puede ser potencialmente mortal.
    La mayoría de las personas que consumen una estricta dieta cetogénica baja en carbohidratos nunca alcanzan niveles superiores a 3 milimolar, de hecho, muchas personas luchan por obtenerlo por encima de 0,5. La inanición a largo plazo, es decir, una semana o más con cero alimento, puede elevar el número a 6 o 7. Pero la cetoacidosis ocurre en niveles de 10+, con más frecuencia 15+.
    Es como la diferencia entre beber un vaso de agua y ahogarse en un océano. Ambas situaciones son sobre el agua, pero no son lo mismo. Beber un vaso de agua no lo hará ahogarse. La cetosis tampoco produce cetoacidosis.

    Si tiene un páncreas en funcionamiento que puede producir insulina, es decir, no tiene diabetes tipo 1, sería extremadamente difícil o, probablemente, imposible obtener cetoacidosis, incluso si lo intentó. Esto se debe a que los altos niveles de cetonas provocan la liberación de insulina, que detiene la producción de cetonas. En otras palabras, el cuerpo tiene una red de seguridad que normalmente hace imposible que las personas sanas tengan cetoacidosis.
  • ¿Acaso nuestro cuerpo no necesita hidratos de carbono?
    No. Este es un mito común. Por ejemplo, muchas personas, incluso profesionales médicos, le dirán que el cerebro necesita glucosa (de los carbohidratos) para funcionar. De hecho, el cerebro puede obtener hasta el 80% de sus necesidades energéticas de cetonas, una fuente de energía producida a partir de grasa en nuestro hígado. Hay algunos tejidos que requieren exclusivamente glucosa para sus necesidades energéticas, como la lente del ojo, los glóbulos rojos y una parte del riñón. El hecho es que el hígado es capaz de producir suficiente glucosa para sostener estos tejidos a través de un proceso llamado "gluconeogénesis". Todos los demás tejidos del cuerpo están felices de quemar grasas o cetonas para sus necesidades energéticas cuando no hay glucosa.
    ¿Pero hemos oído siempre comentar que las cetonas son dañinas?
    Todos producimos cetonas de vez en cuando, sobre todo si disminuye nuestro suministro de carbohidratos en la dieta. Muchas personas los producirán en las primeras horas de la mañana después de consumir los carbohidratos que comieron para la cena. Las personas con una dieta baja en carbohidratos quemarán las cetonas junto con la grasa para la mayoría de sus necesidades energéticas. A veces analizamos la orina de personas que hacen dieta baja en carbohidratos para medir las cetonas y determinar si la dieta está funcionando. Los niveles de cetonas en la sangre en todos estos casos no son lo suficientemente altos como para causar ningún daño. Hay una condición conocida como 'cetoacidosis' que es dañina y parte de la confusión en torno a las cetonas puede deberse a esto. La cetoacidosis es un problema grave que ocurre en los diabéticos tipo 1 cuando no reciben insulina. En este caso, los niveles de cetonas son mucho más altos y los niveles de azúcar en la sangre también son muy altos. Mientras que la cetoacidosis es dañina,
    ¿Es posible que una dieta baja en carbohidratos aumente mi riesgo de enfermedad cardíaca?
    Chocamos otra vez con otro mito común. Se basa en la idea de que si eliminas carbohidratos como fuente de energía, tendrás que aumentar la ingesta de grasa para compensar (hay un límite en la cantidad de proteína que puedes comer). Se pensó que un aumento en la grasa conduciría al colesterol alto que se asocia con enfermedades del corazón. Sin embargo, cuando se realizaron los estudios sobre esto, para sorpresa de todos, sucedió lo contrario. Las personas con una dieta baja en carbohidratos mejoraron sus lecturas de colesterol incluso cuando aumentaron su ingesta de grasas e incluso cuando aumentó su consumo de grasas saturadas (la llamada grasa mala). Parece que cuando tu cuerpo debe depender de la grasa para obtener energía, la grasa saturada que comes se quema antes de que pueda causar daño. Otro factor que juega un papel en la enfermedad cardíaca es el nivel de inflamación en nuestro sistema. Si los marcadores de inflamación son altos, reconocemos esto como un signo de un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Comúnmente solicitamos una prueba de proteína C-reactiva, un marcador de inflamación en la sangre, para evaluar el riesgo de una persona. Un estudio reciente mostró que las personas con una dieta baja en carbohidratos demostraron marcadores inflamatorios significativamente reducidos.
    Aunque todavía no se han realizado estudios a largo plazo para demostrarlo, la ciencia existente sugiere que una dieta alta en grasas y baja en carbohidratos puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Leer más
    http://www.drjaywortman.com/blog/wordpress/my-big-fat-diet-faqs/

  • ¿Acaso nuestro cuerpo no necesita hidratos de carbono?
    No. Este es un mito común. Por ejemplo, muchas personas, incluso profesionales médicos, le dirán que el cerebro necesita glucosa (de los carbohidratos) para funcionar. De hecho, el cerebro puede obtener hasta el 80% de sus necesidades energéticas de cetonas, una fuente de energía producida a partir de grasa en nuestro hígado. Hay algunos tejidos que requieren exclusivamente glucosa para sus necesidades energéticas, como la lente del ojo, los glóbulos rojos y una parte del riñón. El hecho es que el hígado es capaz de producir suficiente glucosa para sostener estos tejidos a través de un proceso llamado "gluconeogénesis". Todos los demás tejidos del cuerpo están felices de quemar grasas o cetonas para sus necesidades energéticas cuando no hay glucosa.
    ¿Pero hemos oído siempre comentar que las cetonas son dañinas?
    Todos producimos cetonas de vez en cuando, sobre todo si disminuye nuestro suministro de carbohidratos en la dieta. Muchas personas los producirán en las primeras horas de la mañana después de consumir los carbohidratos que comieron para la cena. Las personas con una dieta baja en carbohidratos quemarán las cetonas junto con la grasa para la mayoría de sus necesidades energéticas. A veces analizamos la orina de personas que hacen dieta baja en carbohidratos para medir las cetonas y determinar si la dieta está funcionando. Los niveles de cetonas en la sangre en todos estos casos no son lo suficientemente altos como para causar ningún daño. Hay una condición conocida como 'cetoacidosis' que es dañina y parte de la confusión en torno a las cetonas puede deberse a esto. La cetoacidosis es un problema grave que ocurre en los diabéticos tipo 1 cuando no reciben insulina. En este caso, los niveles de cetonas son mucho más altos y los niveles de azúcar en la sangre también son muy altos. Mientras que la cetoacidosis es dañina,
    ¿Es posible que una dieta baja en carbohidratos aumente mi riesgo de enfermedad cardíaca?
    Chocamos otra vez con otro mito común. Se basa en la idea de que si eliminas carbohidratos como fuente de energía, tendrás que aumentar la ingesta de grasa para compensar (hay un límite en la cantidad de proteína que puedes comer). Se pensó que un aumento en la grasa conduciría al colesterol alto que se asocia con enfermedades del corazón. Sin embargo, cuando se realizaron los estudios sobre esto, para sorpresa de todos, sucedió lo contrario. Las personas con una dieta baja en carbohidratos mejoraron sus lecturas de colesterol incluso cuando aumentaron su ingesta de grasas e incluso cuando aumentó su consumo de grasas saturadas (la llamada grasa mala). Parece que cuando tu cuerpo debe depender de la grasa para obtener energía, la grasa saturada que comes se quema antes de que pueda causar daño. Otro factor que juega un papel en la enfermedad cardíaca es el nivel de inflamación en nuestro sistema. Si los marcadores de inflamación son altos, reconocemos esto como un signo de un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Comúnmente solicitamos una prueba de proteína C-reactiva, un marcador de inflamación en la sangre, para evaluar el riesgo de una persona. Un estudio reciente mostró que las personas con una dieta baja en carbohidratos demostraron marcadores inflamatorios significativamente reducidos.
    Aunque todavía no se han realizado estudios a largo plazo para demostrarlo, la ciencia existente sugiere que una dieta alta en grasas y baja en carbohidratos puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas. Leer más
    http://www.drjaywortman.com/blog/wordpress/my-big-fat-diet-faqs/

Accede o Regístrate para comentar.